Volver al sitio

¡Vacaciones!!! ¡A dormir!...

¿no? Y entonces, ¿Qué hago con el sueño?

¡¡Ya estamos a punto de irnos de vacaciones de Semana Santa!! ¡¡wow!! Parece que fue ayer cuando regresábamos de las vacaciones de Navidad... Pero, dime algo: ¿entre tus planes de vacaciones contemplaste qué va a pasar con el sueño de los más pequeños de casa?

Quizá en tu familia les gusta conservar horarios a toda costa y siempre lo han tenido muy claro, pero también puede ser que se vean muy tentados a robarle horas al sueño para intercambiarlas por horas de diversión… a costa de las modificaciones que pueda tener el sueño… También hay que decir que como cada niño es un mundo, hay a quienes el mínimo cambio puede generarles una gran regresión en el sueño y hay a quienes “rompiendo todas las reglas” puede apenas afectarles.

Como regla general: Entre mejor duerma tu niña o niño en casa más probabilidades tendrá de dormir bien mientras que estén de viaje.

También es verdad que si apenas aprendió a dormir bien, el irse de vacaciones a un lugar diferente a su entorno habitual, horarios diferentes, personas diferentes… puede ser que le afecte más a que si ya tiene un buen tiempo que habitualmente duerme bien. Si te encuentras en el primer caso, lo ideal sería cambiar planes y disfrutar de tu ciudad jeje, pero, si esto no puede ser, aquí te van estos consejos para que puedas llevar a cabo en la medida de lo posible:

-Si necesita más ayuda para dormir que la que necesita en casa ¡No utilices la muletilla de ayuda al sueño que tanto trabajo te costó quitar!

Imagina por ejemplo que el hábito que quitaron fue que si no te tocaba el pelo no conseguía dormirse… bueno, pues no dejes que lo vuelva a hacer durante las vacaciones, ya que regresando a casa podría decir: “quizá ahora ya se puede aquí también”.. y.. ¡oh no! De nuevo a quitarlo… en su lugar da otras ayudas intentando no causar un nuevo hábito, para esto varía este tipo de ayudas y hazlo de manera intermitente.

-Si van a compartir habitación o inclusive cama es muy bueno hablarlo con ellos antes de que suceda:

“Ahora que estaremos en casa de la abuela dormiremos en la misma cama porque sólo hay una libre, pero ya sabes que regresando a nuestra casa cada quien duerme en la suya como siempre”. Esto mismo aplica inclusive si vas a hacer algo que habías dejado de hacer: “Te voy a tomar en brazos hasta que te duermas porque tu pancita te duele mucho, pero en cuanto te sientas mejor ya no necesitarás que haga esto por ti y volverás a dormir igual de bien que siempre”. El hacer esto les ayuda a no confundirse y por tanto a no caer en un refuerzo intermitente.

-Lleva contigo los objetos que necesite para dormir:

Esto incluye objetos de apego, lámparas de noche, cuentos e inclusive ropa de cama que puede hacer que sienta un ambiente más familiar.

-Si tu niña o niño duerme en cuna pregunta por la posibilidad de que te presten una:

Algunos hoteles tienen este servicio y esto te puede ayudar a sentir la seguridad de que tu bebé estará protegida o protegido y a que se pueda llegar a confundir menos sobre la diferencia al dormir cuando están de vacaciones respecto a cuando están en casa. También es verdad que a algunos bebés no les gusta dormir en los colchones delgados de las cunas portátiles, inténtalo y verás que sucede. Así ya estarás más preparada para la próxima ocasión.

-Si te es posible, intenta que tu niña o niño duerma en el mismo lugar durante todas las vacaciones:

Si van a visitar a diferentes familiares elijan un lugar base para dormir ahí todas las noches. Háblalo con ellos, cuéntales que es porque tu bebé lo necesita ya que dormirá mejor al tener que adaptarse sólo a un nuevo lugar; y que en la siguiente ocasión les tocará hacer base en otra casa.

-Haz lo más posible porque tu niña o niño tenga el descanso que necesita durante las vacaciones

Con todo el estímulo y los cambios, puede ser que no duerman bien la siesta durante las vacaciones. Hazlo lo mejor que puedas. Aunque una siesta en movimiento no es lo ideal, es mejor que no siesta, así que puedes hacer coincidir desplazamientos, o paseos con el carrito y las horas de siesta. Recuerda que un niño bien descansado es más adaptable a todos los cambios y gente nueva y por esto mismo si está más descansado todo será más agradable.

-Para evitar/suavizar el jet lag: Si viajas a través de diferentes husos horarios, haz lo posible por adaptarte al horario del lugar al que vas cuanto antes, así como cuando regreses a casa

Por ejemplo, si su hora de despertar es a las 8:00am, despiértale a esa hora al día siguiente que llegaron, para que también sus siestas puedan ser a la hora que normalmente las hace en casa.

Si llegaste muy tarde el día anterior entiendo que no quieras respetar esta hora, pero al menos haz lo posible porque la/s siesta/s no las haga tan tarde para sí poder respetar su hora de dormir habitual.

-Cuando regreses a tu casa, haz de regresar a tu rutina de siempre una prioridad.

Esto te asegurará que las noches vuelvan a ser de verdadero descanso lo más rápido posible.

Cada niño y cada familia es diferente, quizá estos consejos te parezcan demasiado pretenciosos y prefieres no hacerlo, si así fuera, ¡Disfruta! Y si hubiera consecuencias pues ya sabes el porqué.

Y recuerda que si tu niña o niño no duerme bien en vacaciones y no vacaciones, puedo ayudarte. Escríbeme a yadormimos@gmail.com

¡Felices vacaciones o feliz descanso con menos gente en tu ciudad!

Tami

Las recomendaciones de este artículo son una adaptación del escrito por Kim West, LCSW-C, The Sleep Lady. www.sleeplady.com