Volver al sitio

Cuídate mamá....y ¡¡¡Felicidades!!!

· Bebe y niño,Consejo,crianza,Mamá

¿Has volado en avión? ¿Recuerdas lo que dicen sobre las mascarillas en caso de necesitarlas? Si vas con un menor, ¿te debes poner la mascarilla primero tu o ponerla a tu hijo o hija?

¡Ponerla a ti misma es la respuesta! Esta publicación la quiero dedicar a las mamás, ya que aquí en España el día de la madre se celebra este domingo y en mi México lindo y querido el próximo 10. Y para ello les cuento lo que se habló en la conferencia entre Jeanne-Marie Paynel de Voilà Montessori y Suzi Lula del ciclo “Be the best parent you can be” (Se el mejor padre que puedes ser).

Suzi es consejera espiritual, oradora y autora y comienza por contarnos la historia de cómo llego a esto. Pues resulta que ella quería ser una Super mamá y entre más luchaba por serlo veía que estaba más lejos de alcanzarlo… hasta que un día su hijo le dijo: “mamá necesitas sonreír más”… Es ahí cuando se dio cuenta que lo importante no es ser una Super mamá que lo hace tooodo por sus hijos, sino una mamá plena que disfruta de estar con sus hijos y que para ello necesitaba reconectar consigo misma. Y es así como escribió el libro: “The Motherhood Evolution: How Thriving Mothers Raise Thriving Children” (La evolución de la maternidad: Cómo madres prósperas crían hijos prósperos).

Durante la conferencia Suzi toca varios puntos que me parecieron muy interesantes que te quiero compartir, ya que te pueden ayudar a ser más feliz y por consecuencia a ser una ¡persona, pareja y mamá más plena!

-Cambia el contexto: Hoy en día, la sociedad nos hace sentir que si atiendes tus propias necesidades, eres egoísta… y peor aún si las atiendes antes de las de tu bebé… Cuando en realidad si tu satisfaces tus propias necesidades conectas con el paradigma de la abundancia y es así como puedes realmente dar mucho más a tu hijo… Es verdad, tus tareas en casa no van a cambiar, igualmente tendrás que cambiar pañal, despertarte por la noche (con esto te puedo ayudar jeje), hacer la comida, etc… pero lo que cambia es el YO quien hace esa tarea, y que hasta puedes llegar a disfrutar.

-Lucha por recuperar la felicidad con la que naciste: Los niños nacen con ella, y lo hacen porque saben pedir lo que necesitan, con ello sus necesidades son satisfechas, son sabios, están conectados consigo mismos… Por tanto para tu recuperar esta felicidad necesitas cuidar de ti misma. Cuando nos preocupamos por satisfacer nuestras necesidades, nos reconectamos con nuestro propio ser, nuestra sabiduría interna, nuestra capacidad para ser felices. Y lo más importante, modelamos esto a nuestros hijos y es lo que ellos verdaderamente aprenden: El valor del auto cuidado.

-Pregúntate: “¿Qué necesito?” De esta forma nos estaremos ubicando en la misma situación que nuestros hijos y podremos crear esa atmósfera en la que todos permanecemos conectados con nuestro propio ser. Es la madre quien establece el tono espiritual del hogar y por tanto, si ella cuida de sí misma tiene la capacidad de crear esa atmósfera de tranquilidad. Muy importante también preguntar a nuestros hijos “¿qué necesitas?” Esto les permite mantener esa conexión con ellos mismos y sus necesidades.

-En momentos de caos, pregúntate: ¿Qué necesito para mantener la calma?. La madre calmada que quieres ser, está dentro de ti… quizá haya que hacer un largo viaje para encontrarla, pero en realidad no está más lejos que los latidos de tu corazón. Puede requerir de ti un cambio en la forma de ver las cosas, como por ejemplo: Una casa ordenada no es tan importante como una relación en calma con tu niño. Es el poner el foco en el recorrido y no en el destino, es dejar de preocuparte por tener toda la ropa lavada y doblada y por ejemplo dedicar el tiempo de esa tarea a realizarlo con tu hijo, que aunque te lleve 3 veces más tiempo habrás conectado y le habrás enseñado a hacer algo que podrá hacer en un futuro.

-Busca como sí: Lo se, el tiempo, falta de ayuda puede ser un impedimento… para esto nos recomienda empezar por pequeñas cosas. Por ejemplo, darnos el permiso de parar un momento, dejar las tareas de la casa y ponernos a colorear con nuestro hijo… esto es buenísimo: desconectas de las tareas del día a día, trabajas tu lado derecho del cerebro y conectas con tu hijo… además, cuando regresas a lo que tienes que hacer regresas más conectada contigo misma.

-Conecta con tu verdadero yo, con tu esencia propia más allá del mundo de las tareas. Para esto recomienda un ejercicio que consiste en tomar una foto tuya de cuando tenías menos de 5 años, o si es de bebé aún mejor y una foto de tu hijo también de cuando era (o es) menor de 5 años… Antes de dormir, recuéstate y mira una de las fotos de esos niños a los ojos y luego cambia la foto que estás viendo, date 10 minutos para hacer este ejercicio y verás como cambia la percepción de las cosas.

-Medita: Puede ser con tu hijo, sin él, 3-5 minutos… Puedes por ejemplo sentarte en una silla y escuchar una canción, da permiso a tu corazón de llenarse de nuevo… y entonces regresas a hacer ese cambio de pañal… Verás que lo haces con otros ojos y que inclusive puedes disfrutar y conectar mejor con tu bebé… Además que si tú meditas es lo que modelas a tu hijo y quizá por lo mismo aprenda a darse ese tiempo y estarás haciendo una gran contribución a la paz mundial.

-Deja que tu hijo sea tu guía para reconectar con tu propia esencia: Los niños están muy conectados con su esencia y nosotros lo estábamos cuando éramos niños. El dejarnos llevar por esto, nos permitirá ser más felices, permitirnos jugar, divertirnos.

-Cambia el hacer por estar: El mundo de ahora valora más el hacer, y si nos dejamos llevar y nos preocupamos por hacer y hacer en vez de estar presentes con nuestros hijos, perdemos esa conexión tan íntima y valiosa que puede existir entre nosotros. Así que recuerda: Lo más valioso para tu hijo o hija es tu presencia.

-No tengas miedo de mostrar a tu hijo que tú también pasas por momentos difíciles. Quizá necesites salir de la habitación por un momento y respirar profundo, quizá sea algo que debas pensar más y está bien dejarles saber que tienes un problema que estás buscando cómo resolver (y confía, la solución está dentro de ti)… Con esto estarás enseñando inteligencia emocional, en vez de actuar por impulso. “Así es como resuelvo mis cosas, me tomo un momento para pensarlo, me siento con mi problema para llegar a la solución que está dentro de mi”

¡Y por cierto! Dormir bien es muy importante para el cuidado personal, si tu niña o niño no duerme bien y quieres que te ayude para que tu también puedas dormir bien, escríbeme a: yadormimos@gmail.com

¡Un abrazo mamás, disfruteeeeeeen!

Tami